Día Mundial De La Asistencia Humanitaria, También Es Nuestro Día
Quienes trabajamos en Save the Children tenemos un mandato de trabajar en acciones humanitarias cuando así lo requiera la organización. El trabajo humanitario a nivel global ocupa la mayor proporción de las acciones que realizamos.
El 19 de Agosto, día de la Asistencia Humanitaria, también es nuestro día. Si bien todas y todos tenemos que trabajar en esta misión en Bolivia hay un equipo humanitario líder que trabaja intensamente en la implementación de las acciones de emergencia. Este equipo, al igual que todos los equipos en Save the Children, realiza una gran cantidad de acciones para lograr sus objetivos, varias de ellas quedan en el anonimato, pero para el equipo humanitario sólo el hecho de cumplirlas, con la mejor calidad posible, es una satisfacción que les mueve para seguir trabajando en esta misión.
Dentro de la gran cantidad de acciones que el equipo humanitario de Bolivia realiza, hay algunas que han marcado líneas de trabajo y conceptos clave para los proyectos de desarrollo. Entre 2015 y 2017 se desarrolló el proyecto de emergencias “Mejorando la seguridad y soberanía alimentaria mediante el incremento de los ingresos del pequeño productor en Santa Cruz”. Por entonces el equipo humanitario había desarrollado los criterios para determinar a qué familias o personas se atendería en la acción de emergencia. Uno de esos criterios era el de “Madres jefas de hogar», que eran identificadas como una de las poblaciones en mayor situación de vulnerabilidad. Ellas eran las madres que asumían muchas responsabilidades de la familia, desde la crianza de los hijos, las hijas, su educación, salud, además de ocuparse de los trabajos productivos y asegurar los ingresos para la subsistencia de la familia, entre otras palabras, todas las responsabilidades de la familia recaían en estas mamás jefas de hogar, cuatro palabras explican una vida.
Esas madres jefas de hogar recibían asistencia del proyecto en insumos, semillas, alimentos y otras asistencias, para enfrentar las adversidades que la situación de sequía en la zona les había colocado en una situación de alta vulnerabilidad. Esas acciones permitieron que varias de esas familias puedan mitigar las carencias y dificultades que atravesaban.
Años más tarde, este concepto de “madres jefas de hogar» se trasladó al proyecto de desarrollo “Espacios Integrales de Aprendizaje” (EIA) en sus dos versiones. Con el asesoramiento del equipo humanitario se desarrolló un componente de Empoderamiento Económico que consistía básicamente en que las mamás participantes eran identificadas, luego pasaban por un proceso de tecnificación, desarrollaban un emprendimiento para lo que se les proporcionaba insumos y/o equipamiento y al final se les ayudaba a insertarse en un mercado local o nacional para asegurar sus ventas.
El desarrollo de este componente se constituyó en un salto cualitativo significativo porque las mamás jefas de hogar participantes en el proyecto EIA eran capacitadas en estimulación temprana, pero además podían generar ingresos para mejorar la educación de sus hijas e hijos, lo que también les permitiría ejercer otros derechos en mejores condiciones.
Esta contribución del equipo humanitario de país a los proyectos de desarrollo es una de varias y también es un buen ejemplo de innovación, igual que la exitosa implementación de parte del equipo del proyecto EIA es un buen modelo de acción.
Autor: Fidel Alvarez, Coordinador Nacional de Monitoreo, Evaluación, Rendición de Cuentas y Aprendizaje.